País: España (Catalunya)
Productor: Cerveses La Mola
Estilo: IPA
Servir en: Vaso ancho, tulipa
Puntuación (Diciembre -2013)
Ratio ratebeer: -/-- %
Puntuación ratebeer: -.--
Mi puntuación: 5/10
Que el boom de la cerveza artesanal hasta convertirse en una moda surgió en Catalunya es incuestionable. A razón de ello han surgido una multitud de micros repartidas por todas nuestras comarcas que hacen posible poder catar una cerveza local en casi cualquier lugar al que vayamos, lo cual es una gran noticia. Que como en toda explosión de este tipo,
Tras el comentario recibido por Víctor sobre mi entrada, he de reconocer que mi apunte no es acertado. Es cierto que probar un lote de cerveza de la marca no puede dar una opinión completa sobre Cerveses La Mola.
La Mola es el pico más alto de la Serra de Sant Llorenç del Munt i l'Obac, una de las sierras más características de la geografía de la comarca. A pesar de sus 1.104 m de altitud, es una de las ascensiones más asequibles para el público de todas las edades y además cuenta con un monasterio y un restaurante en su ámplia cima. Así que ya hemos conseguido lo que necesitamos; un nombre reconocible y emblemático.
Flaco favor le hace a este icono la cerveza que cayó en mis manos, regalo de mi gran amigo Jan.
De color ambarino turbio, presenta una excesiva capa de espuma que haría enrojecer de vergüenza a cualquier cerveza de trigo alemana. Si bien conseguir una capa de espuma correcta es una de las características más complejas de una buena cerveza, ésta debe ser adecuada en calidad y cantidad. ¡Una IPA necesita sus buenos dos dedos de espuma, no medio vaso!
El aroma parece perjudicado por esta excesiva espuma, pues aunque uno distingue los matices característicos del estilo, afrutado, cítrico y especiado, son poco intensos y duraderos. Teniendo en cuenta que las IPA son uno de los estilos preferidos por el público, y que actualmente se están produciendo verdaderas maravillas, La Mola IPA se queda muy, pero que muy corta en aroma.
El sabor es un reflejo del aroma: se acerca a lo que debería ser, pero en esta ocasión, una excesiva carbonación, que hace que parezca que te estás bebiendo una fanta en vez de una cerveza, enmascara todas las opciones. Para rematar el trago, el retrogusto es prácticamente inexistente.
A mejorar en todos los aspectos.
Espero poder probar esta cerveza de nuevo y borrar la mala primera impresión que me llevé. Aunque como dije al principio, hay que tener cuidado con lo que se ofrece, por lo que ese lote quizás no debería haber salido a la venta.